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El reclamo es uno: espacio y condiciones dignas para enseñar y aprender

La Seccional Federal de AGMER se encuentra realizando un firme reclamo por condiciones de infraestructura para 60 alumnos a días del comienzo de clases. La Escuela Integral Nº 13 de dicha localidad, o más bien el lugar que han destinado para su funcionamiento hasta tanto se construya un edificio como corresponde, se encuentra en un estado de abandono y precariedad en el que salta a la vista la ausencia del estado para con los más vulnerables.

 

“Para que de una vez por todas el paradigma de la inclusión supere al de la insensibilidad y el abandono”, así comienzan su comunicado los docentes de la Seccional Federal de AGMER, que encaran en este momento un firme reclamo por las condiciones edilicias en las que se pretende que, en pocos días más, funcione la Escuela Integral Nº 13.

 

“Como Seccional Federal de AGMER hemos apostado a la Paritaria como herramienta para establecer una agenda de infraestructura que genere obra escolar, priorizando a los sectores más vulnerables. Pero en este camino la respuesta de la gestión ha sido nula. Estamos cada vez peor” señalan desde el departamento.

 

Manifiestan desde la Seccional que no serán cómplices de ignorar esto, señalando que se encuentran en estado de alerta: “porque son los padres de los alumnos los que se acercan preguntando si en esas condiciones empezarán las clases sus hijos: hacinados, con las aulas que se llueven ante cada tormenta, casi sin muebles, con la madera de sillitas y mesitas dobladas por la mojadura, con el horno de pan apoyado sobre dos banquetas sin poder usarlo, sin cocina ni comedor, sin barandas en las precarias rampas, sin baños adaptados… hablamos de una Escuela Integral… en pocos días 60 alumnos deberán comenzar las clases en las viejas instalaciones del Ferrocarril”.

 

Insensibilidad. Discurso y promesas desvanecidas en una realidad que transcurre y que nos pone a fines de febrero ante este panorama. “Sobra soberbia y autoritarismo por parte de las autoridades para amenazar docentes que ponen de cara a la sociedad esta situación que refleja claramente que en estas condiciones no se puede comenzar un normal dictado de clases. Mención aparte merecen las propuestas absurdas de ‘Aulas Móviles’ para niños con graves problemas de motricidad”, señalan.

 

“Pero así como, con una insensibilidad imperante, pretenden tapar el sol con las manos, existe una comunidad escolar y familiar que le aporta dignidad al reclamo porque saben que sin movilizar y exigir, todo discurso sobre discapacidad e inclusión es letra muerta”.

 

 “Sosteniendo nuestro estado de alerta y movilización, reclamamos espacios y condiciones dignas para la Escuela Integral Nº 13 y la inmediata puesta en marcha de la construcción de un edificio escolar propio, para que de una vez por todas la inclusión sea una realidad y supere a la insensibilidad y el abandono”, señalaron desde la Comisión Directiva Departamental de AGMER Federal.

 

 

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